Entrenamiento Infantil

El deporte nació y se creo específicamente para la competencia, es decir, desde sus inicios ésta fue su principal característica: la competencia entre adultos. Con el paso del tiempo, su práctica se trasladó a la infancia de la misma forma, es decir, siempre imitando el deporte de los adultos siendo enfocado principalmente al espectáculo y los objetivos de la competencia.

La situación se ve agravada, en parte, porque los entrenadores se han formado tradicionalmente en ausencia de toda preparación pedagógica y buscan sobre todo en el deporte escolar el rendimiento y la competición.

 “No se trata pues, de educar para el deporte, como si éste fuese el coronamiento de la educación física, sino de educar a través del deporte. No hay oposición, además, entre deporte y educación física, ya que la actividad deportiva es considerada como un sistema de educación, tanto sea entrenamiento físico o simplemente recreación” (A. Listello 1959).

El deporte en los niños entonces, debe utilizar como centro de interés el gusto de los niños por las actividades deportivas para, a través de ellas, alcanzar una formación completa, física, motora, moral y social, y a la vez extender el gusto por estas actividades mas allá de la edad escolar.

 

“Deporte en la infancia son todas aquellas Practicas deportivas que se llevan a cabo de forma educativa, independientemente de su contexto de aplicación, y que respetan las características psico-evolutivas de los alumnos” (Giménez, 2003)

El entrenamiento infantil  desarrolla en los niños las siguientes capacidades:

  • Conocer su propio cuerpo y sus posibilidades de acción.
  • Observar y explorar su entorno familiar, social y natural.
  • Adquirir una progresiva autonomía en sus actividades habituales.
  • Relacionarse con los demás y aprender las pautas elementales de convivencia.
  • Desarrollar sus habilidades comunicativas orales e iniciarse en el aprendizaje de la lectura y de la escritura.
  • Iniciarse en las habilidades numéricas básicas.

IFICED busca desarrollar competencias en sus alumnos para que apliquen correctamente  programas educativos que coadyuven en la formación de los niños con un entrenamiento infantil coherente e integral.